Crónicas de Guaribe; Bislenia Celestina Silva Correa

 Crónicas de Guaribe

Soraya González Rojas

Cronista oficial Municipal

Gabana64@hotmail.com

Bislenia Celestina Silva Correa

Para engalanar mi crónica N° 430, presento hoy a una mujer muy popular en el acontecer diario de San José de Guaribe, se trata de Bislenia Silva Correa, a quienes muchos por cariño, le dicen “La Comaita”. Hija de dos seres maravillosos como lo fueron el señor Tito Silva quien fue artesano, trabajaba la madera y se dedicó también por un buen tiempo a ser barbero y de doña Ricarda Correa de Silva, quien fue una gran costurera y se dedicaba también a la dulcería criolla. Ambos seres con una condición humana extraordinaria, cargados de un gran amor por Guaribe y su gente. Bislenia nació en este pueblo un 21 de diciembre de 1948, la trajo al mundo doña Carmen Julia Martínez. Su infancia fue feliz y compartía dichosamente con otras amigas y primas, donde recuerda a Riguei Characo, Diana González, Rafaela Ytriago, Carmen Luisa Álvarez, Margot Ávila, entre otras, fueron muchas las horas que pasaban jugando con las muñequitas de trapo que les elaboraban sus madres. A muy temprana edad sintió especial atracción por el baile de joropo yabajero acompañado de nuestra bandola cordillerana, esto, producto de su asistencia a algunas fiestas que se realizaban en las casas de familia, y en  donde un buen día teniendo ella 5 añitos de edad, se encontró en una de ellas, a Julián Acosta, quien siendo un muchacho bien joven, y viendo su interés por la música, la sacó a bailar y de allí en   adelante donde lo veía le pedía que la enseñara, hoy con gran orgullo dice: “Bailo bandola y amo el joropo yabajero, gracias a Julián Acosta que me enseñó”. Esto hizo que fuera una pareja muy cotizada en los bailes, fueron muchos los parejos que buscaban a Bislenia para bailar, aunque fuera una sola pieza, dentro de ellos, mi padre Luís González. También es experta bailando otros géneros como merengues pasodobles, guarachas, y comenta que su parejo preferido era su hermano Tito, hoy fallecido. Única hembra en un grupo de 6 hermanos varones: Eurípides, Adonay, Argenis, Sergio, Tito y Javier.

     Bislenia es alegre, entusiasta, siempre le ha gustado participar en eventos culturales y festividades que se celebran en el municipio. Hace algunos años participó en la fiesta de los locos celebrada en el Club Social Guaribe, el 28 de diciembre, con un disfraz elaborado por su hermano Tito, con el cual ganó el primer lugar y se convirtió en la reina de la fiesta. Es sumamente católica, creyente, asiste frecuentemente a la iglesia, donde pertenece al movimiento de damas católicas del municipio.

     Para el año 1993, participó en un taller de elaboración de muñequitas hechas en fibra vegetal, el cual fue dictado por Noemí Artílez en el ateneo de Guaribe, desde ese momento no ha decaído en la elaboración de sus muñecas, cosas que la ha hecho famosa y reconocida a nivel nacional, e internacional. Su dedicación en el ámbito artesanal, la llevó a ser presidenta de la asociación de artesanos Celestino Rivas, esto le permitió recorrer Venezuela entera llevando a otras fronteras la artesanía de muchos hombres y mujeres de este pueblo. También es una excelente cocinera, teniendo especial gusto por preparar platos típicos de la localidad, sobre todo los granos, los cuales le quedan a pedir de boca. Amante de las plantas, tiene a su cuidado un bello jardín, el cual era uno de los lugares preferidos de su madre, podemos señalar que doña Ricarda en sus años mozos tuvo la iniciativa de sembrar 5 matas de cotopriz (o cotoperiz) en el patio de su casa la cual está ubicada en la calle Bolívar, de las mismas, 3 salieron machos, es decir que no cargan y dos salieron hembras, estos, según la gente, son los cotoprices más divinos de este pueblo. En época de carga, muchachos, adultos y niños, hacían colas para comprar un litro de esta fruta, la cual, desde tempranas horas de la mañana, ya las tenían recogiditas y organizadas en laticas de aceite de motor bien limpiecitas, para ser vaciadas en las bolsitas del que deseaba adquirirlas, eso era todo el día gritando en la puerta de la casa: “Doña Ricarda deme un litro de cotoperiz”, el cual, en esa época, costaba medio, o sea 0,25 céntimos.  Esta tradición, después que sus padres fallecieron, la siguió nuestra amiga Bislenia, quien comenta que este año no cargó casi nada, pero que si echó hojas parejas, las cuales les lleva horas barrerlas y amontonarlas.

     Esa es nuestra Comaita Bislenia, reilona pero también con su carácter, muy humana y colaboradora, siempre bien acicalada, maquillada.   En la foto, unamuestra de Bislenia y de sus muñequitas de fibra vegetal, a quien dice que quiere como las hijitas que no tuvo.

 ¡Mis saludos para ti!